28/10/2018
Marco destaca la voluntad del Gobierno municipal de sensibilizarse con las personas con menos recursos
El Gobierno municipal de Castellón congelará la tasa de basura para 2019, de manera que el recibo se mantendrá como este año, a pesar de haberse incrementado el coste del servicio. La diferencia en el coste de la gestión del tratamiento de los residuos sólidos será asumida por el Ayuntamiento. Al mismo tiempo, se mantiene la cuota hiperreducida de la tasa de la basura destinada a familias en riesgo de exclusión social.
La alcaldesa, Amparo Marco, destaca la voluntad del Gobierno municipal de "impulsar una fiscalidad justa y progresiva", en la medida que la legislación estatal lo permite, ya que impone limitaciones a los ayuntamientos a la hora de aplicar las tasas de impuestos en función de la capacidad económica de cada familia. "Hay que ir incorporando modificaciones en la fiscalidad que vayan en la línea de favorecer una cierta progresividad", ha afirmado.
Las familias beneficiadas de esta cuota hiperreducida serán aquellas cuyos ingresos no superen el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples. El IPREM de 2018 está fijado en unos ingresos anuales máximos de 7.519 euros. El recibo final estará entre los 18 y los 20 euros, en función del valor catastral del inmueble. La medida podría beneficiar a unas 2.000 familias. Las personas interesadas en acogerse a la tarifa pueden informarse en las dependencias de la Administración Tributaria Local, en el edificio nuevo del Ayuntamiento, o en las tenencia de alcaldía.
Los inmuebles con valor catastral más bajo, unos 35.000, ya vieron congelado el recibo hace dos años. La tasa de basura tiende a cubrir el coste del servicio, en este caso la recogida y tratamiento de los residuos que generan las familias y las empresas, pero el Ayuntamiento solo repercute a la ciudadanía el 75% de los costes y asume el 25% restante, según remarca el concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo.
En la última revisión fiscal ya se modificó el cálculo de la tasa para los despachos profesionales compartidos, de manera que se paga una cuota única. En el caso de que un inmueble haya varios titulares que ejerzan la misma actividad, se aplicará la cuota de mayor cuantía. Si se trata de personas físicas y personas jurídicas, la liquidación se exigirá a estas últimas. Si se trata de actividades distintas, cada titular deberá satisfacer su cuota.
Castellón, 28 de octubre de 2018